El Gran Hermano existe, y eres tú. Así empieza la descripción de este juego Orwelliano (tanto que ese es su título) en donde controlas una herramienta de nombre “Orwell” que te permite investigar todo sobre los ciudadanos de La Nación.
Así es, si eres fan de 1984, notarás que todo el trasfondo es una distopía en donde “El Partido” maneja “La Nación”, manteniendo a toda su población vigilada con cámaras, este es el punto que detona la trama…en más de una manera.
Originalmente publicado por el desarrollador alemán Osmotic Studios en episodios semanales, Surprise Attack publicó el juego y ahora está a la venta en Steam.
Historia: 9.5/10
Eres la primera persona en ser aceptada para el programa Orwell, ya que necesita el componente humano para hacer deducciones. El día que vas a estrenar el Sistema hay un atentado donde estalla una bomba en la Plaza de la Libertad, y tu trabajo es encontrar al responsable antes que vuelva a atacar. Tu primera sospechosa es Kelly Osbourne, o al menos su versión digital Cassandra Watergate (su nombre tendrá mucho sentido si saben algo de historia de EUA), a quien debes investigar en sus redes sociales y sus contactos con el grupo Thought, aparte de investigar exactamente qué es Thought.
Por supuesto, no todo es tan fácil como aparenta, y los problemas de tener un sistema que simplemente acusa basándose en información encontrada en línea. El juego a veces rompe la cuarta pared, pero en lugar de alejarte, hace que te adentres más en el mundo.
Especialmente porque todo el juego se refleja como un programa, así que eres un usuario del programa Orwell, eres el “investigador” que está fuera de la Nación, y tu superior es un “consejero” que es un oficial gubernamental de la Nación; él puede hablar contigo, pero la comunicación es de una sola vía, por diseño del programa.
El punto que hace Orwell, es que tú mismo vas hilando la trama; tus decisiones tienen peso, especialmente cuando le pasas información a tu superior que pueda considerarse peligrosa para el Estado. Este es el tema principal del juego: la información está ahí, pero cómo la manejamos e interpretamos es lo que nos lleva a actuar, y a veces actuamos sin tener toda la información.
Orwell tiene tres finales alternativos (pero, sin spoilers, la escena final es la misma, y es bastante tétrica) así que puedes volverlo a jugar una y otra vez para ver cómo afectan tus acciones al mundo.
Gráficas: 7/10
Podrían ser mejores, pero no lo necesita. Los personajes sólo aparecen en fotos, fuera del video introductorio, y están diseñados en 2D con triángulos y vectores. El resto del juego es texto en el programa de vigilancia. El color base es un azul claro agradable a la vista y que no cansa si vas a estar horas viendo la pantalla.
Gameplay: 8.5/10
Tú no juegas Orwell, Orwell juega con tu mente en todos los sentidos. Los eventos se desarrollan no en tiempo real pero la acción empieza el 13 de abril de 2017, está diseñado para abarcar esas fechas lo cual lo hace una gran coincidencia que empecé a jugarlo esa semana. De hecho, cuando entras al juego, en lugar de una pantalla de “loading” (“cargando”), te dice “logging in”, creando la atmósfera de estar trabajando con un sistema operativo relativamente sofisticado.
El programa te lleva de la mano para incriminar o rescatar a la gente que estás espiando, con fragmentos del texto subrayados, a veces los fragmentos se contradicen así que tienes que escoger el que quieres que el programa procese, y al ignorar o procesar ciertos fragmentos, puedes cambiar cómo ve a ciertos personajes.
Si estás acostumbrado a un juego rápido donde constantemente tienes que cambiar tu estrategia: Orwell no es para ti. Aunque contiene partes donde tienes que reaccionar rápido y tus decisiones mientras los personajes hablan por teléfono les afectan, el resto del juego tienes tiempo de sobra para resolver el misterio, habrá momentos en que no puedes avanzar si no subes algunos fragmentos específicos.
Orwell se basa enteramente en texto, haces clic en las partes subrayadas, buscas imágenes o pistas para buscar al responsable del atentado, una ejecución muy simple, sin mucha complejidad que realmente no necesita, y además el juego se detiene por alrededor de 10 minutos mientras te explican el clímax de la historia.
El único problema es que no puedes grabar, todo se guarda automáticamente y el programa te avisa constantemente cuando subes un fragmento de información que no hay marcha atrás; esto tiene sentido dentro del juego, pero es molesto si te das cuenta que algo que hiciste tuvo las consecuencias opuestas a lo que querías.
Es un juego que puedes terminarlo en cuatro horas, al menos si sabes lo que haces, así que empezar desde cero, aunque es molesto, no es tan difícil; eso sí, si terminaste el juego, puedes volver a empezar desde cualquiera de sus cinco episodios sin problemas.
Como punto aparte, la música te pone en el momento de manera muy efectiva. Especialmente si juegas con audífonos, la música te envuelve con el resto del juego… y no fue nada agradable cuando se detiene la música para hacer el golpeteo de película de horror justo cuando se abrió la puerta de mi cuarto.
Precio: 10/10
El juego cuesta $109.99 pesos, y como se mencionó antes, la duración del juego es de alrededor de cuatro horas. Si quieres explorar todas las opciones al negar o manipular información, ese número puede aumentar a uno o dos días. No es de los juegos más baratos, especialmente por su duración, pero la experiencia vale los 110 pesos. Si todavía tienes dudas, el juego ofrece un demo gratuito con el primer episodio completo.
General: 9.0/10
Si buscas un juego que te hace pensar, donde tus acciones tienen consecuencias y no te importa que las gráficas no sean las mejores, dale una oportunidad a Orwell. Conviértete en Big Brother.
Esto fue Steam Reviews, la sección donde recomendamos (o sufrimos) los juegos independientes que se pueden encontrar en la plataforma de Valve.